Luchador pro democracia encarcelado informó el 17 de octubre sobre pésimo servicio asistencial y peligros que corre
El activista de los derechos humanos preso Orestes Yumar Julién Gómez denunció el pasado lunes desde la Sala de Penados del Hospital Provincial Camilo Cienfuegos, de Sancti Spíritus, las deplorables condiciones existentes en esa dependencia.
“Esto es una pura cochinada”, manifestó la fuente, que precisó: “El desfile de cucarachitas y hormigas parece un carnaval de esos bichos. La comida es un asco, y los baños son una inmundicia; las pilas ni siquiera tienen mariposas”.
En otro orden de cosas, Orestes Yumar expresó: “Me han hecho diversas pruebas médicas, pero en casi una semana no me ha visto el especialista de garganta, a pesar de la inflamación que tengo en el costado derecho del cuello”.
Julién Gómez también denunció: “Hay dos equipos de televisión rotos. Es frecuente que no permitan a los familiares ver a los enfermos, como sucedió hace unos días con mi hermana Lidieski”. Y puntualizó la fuente: “Esto es un campo de concentración. Aquí emplean una forma psicológica para que la gente pida el alta”.
El activista pro democracia continuó precisando: “El oficial Rigoberto Nazco Piña me comentó el sábado que mis denuncias ‘siguen sonando’. Me dijo que tenía que hablar conmigo, pero no aquí, sino cuando regrese del hospital a la prisión”.
Y concluyó Orestes Yumar: “Considero que eso es una amenaza; estoy sufriendo represalias. Si las cosas no cambian, tendré que comenzar una nueva huelga de hambre; y desde ahora responsabilizo a las autoridades carcelarias comunistas por lo que pueda sucederme”.
Reportó, desde Sancti Spíritus, Ana Margarita Perdigón, Agencia Yayabo Press
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