“Ahora somos carairas”

Consumidores de carnicería protestaron el 16 de agosto en Sancti Spíritus por el estado de putrefacción de la mercancía

Este martes, la Casilla número 46, en la zona del Camino de Las Cañas en la ciudad capital espirituana, fue abastecida con huesos y patas de res y de cerdo. Los vecinos se enteraron rápidamente del suceso debido al fuerte olor a podrido que despedían los suministros.

Este corresponsal presenció las protestas y comentarios airados de la mayoría de los usuarios, mientras que otros optaban por comprar en silencio algunas piezas de los comestibles descompuestos.

Eduardo Valdivia, uno de los parroquianos, ideó un neologismo sarcástico al comentar en alta voz: “Va a haber que cambiarle el nombre a este comercio; en vez de carnicería tendremos que llamarlo carroñería”.

Y el mordaz espirituano concluyó recordando el nombre aborigen de una especie de cuervo cubano: “Antes éramos perros, pero hemos evolucionado; ahora somos carairas”.

Reportó, desde Sancti Spíritus, Tomás García Macías, Agencia Yayabo Press.